Empezaré mi Blog con un pequeño homenaje a mi ciudad natal, La Coruña.
La ciudad polaca de Slupsk ha elegido como vencedor el sonido de las olas del Orzán entre más de 600 aspirantes, cómo el sonido de mar más bonito del mundo.
Y no me extraña.Las olas de mi ciudad embrujan, atrapan, te marcan, y enmarcan muchos momentos de mi vida, así que aunque sólo sea egoistamente, los coruñeses le debemos ser parte de nosotros.
Al margen de que inevitablemente sea un elemento en nuestra vida, invito a todo el mundo a que visite Coruña ( y sí lo pongo sin la LA ó con la A , o con la LA, porque es nuestra y podemos escribirla cómo queramos) porque vale la pena , no sólo por su mar, sino por sus rincones especiales, por su Historia de tierra luchadora, por su gente.
Un paseo a solas por la Ciudad Vieja, escuchando sólo el eco de la piedra húmeda, sólo puede darse en un sitio tan especial cómo mi ciudad, el balcón de Atlántico, dicen para venderla turísticamente, y yo digo que más que frases hacen falta imágenes, sonidos y pasión, la pasión de las olas chocando contra las rocas del Orzán.
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